Saliendo de Budapest hacía dirección al norte. Parada en Visegrad, a 40 kms de Budapest, antigua sede real (en el siglo XIV) , donde residía el rey Carlos Robert y el castillo fue devastado varias veces, después de la Dominación Otoma del siglo XVII ya perdió su función militar. Desde sus murallas se ofrece una de las vistas más bonitas sobre la región que se llama Recodo del Danubio. Después de Visegrad parada en Szentendre, un pueblo encantador a la orilla del Danubio. Sus casas del siglo XVIII fueron construidas por comerciantes serbios y griegos que venían desde los Balcanes, que buscaban refugio por la amenaza de las tropas Otomanas . A principios del siglo XX muchas de sus habitantes de origen serbio y griego se han ido para buscar trabajo en otros sitios y llegaron aqui artistas hungaros en busca de tranquildad e inspiración para sus pinturas. Después de dar paseo a pie visitamos una iglesia ortodoxa griega. Tiempo libre para poder disfrutar una de sus cafeterías acogedoras o pasear por sus calles buscando un regalo en las tiendas que ofrecen todo tipo de objetos de artesanía hungara, o posibilidad de visitar el museo de ceramica Margarita Kovacs. Regreso a Budapest.